24 nov 2013

18 nov 2013

ME,MYSELF & MI MOCHILA

Hoy salgo del tema moda y dedico espacio a mi ultimo viaje que creo valga la pena compartir! 
A principio de Noviembre he decidido pasar vacaciones de forma nueva! 
 Primera cosa: he viajado sola!No  obstante varios tentativas de mi madre en convencerme abandonar la idea,y alguna propuesta de viaje organizado.
Segunda cosa: mi viaje ha sido con una mochila! Su peso era de solo 7kg, en su interior solo 3 sandalias, algunos shorts, algunas camisetas de manga corta y otras largas, dos vestiditos,nada de maquillaje y nada de accesorios! 
Para mi todo un record! 
Yo, mi mochila y muchas ganas de conocer Thailandia y Cambogia. 
La primera ciudad ha sido Chiang Mai en el norte de Thailandia,donde he encontrado lo que buscaba : una forma espiritual muy intensa pero delicada! Los varios templos con los monjes que rezan, meditan y te invitan a charlar con ellos! Gracias a uno de ellos he aprendido que no hay que sufrir por lo que se ha perdido, porque nada es permanente. 
Me quedé cuatro días: tiempo perfecto para disfrutar de la belleza de la naturaleza que hay al rededor de la ciudad,para disfrutar de masajes baratisimos y para hacer compras en el street market del domingo.
Segunda parada: Siem Reip en Cambogia! Esta ha sido la parte de la viaje que más me ha enriquecido. Hay algo mágico, salvaje, aún puro y no demasiado turístico y que me ha llegado desde el primer momento. Los viajes en tuk tuk hacía los templos, mi permanencia en el Angkor Bodhii tree center ( gracias Claire y Hellain) y disfrutar de las clases de yoga, de la teraza con el sonido de los grillos, conocer a Kristine y Ren y dar vueltas con la bici por el centro de Siem! Pero el momento que más me ha llenado ha sido cuando a pocas horas de llegar decidí ir a ver el caer del sol en unos de los templos. Se me calleron las lagrimas de la emoción en poder vivir un momento tan sencillo pero tan lleno! 
La segunda semana decidí pisar la arena en la isla de Phi Phi, parando primero en krabi y Railay. Sitios paradisiacos y que me han permitido conocer a mucha gente y dos nuevas amigas de Canada. Dormir en ostales también ha sido una nueva experiencia y he tenido la suerte de compartir habitación siempre con gente simpatica. 
Bangkok me ha confirmado que lo sagrado siempre se cruza con lo prohibido.
He disfrutado mucho de mi misma y he descubierto que unas vacaciones llenas de buenos momentos no son las que te ofrecen miles de comforts y lujos.
He vuelto a Madrid con mucha energia, feliz de mi misma y cociente de lo afortunada que he estado! Esta experiencia vale para mi mas que cualquier camiseta!